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Existen circunstancias en nuestra vida que nos impiden cuidar a nuestro peludo, y por tanto, nos obligan a tener que buscar a una persona para que lo pueda cuidar y mantener hasta que esas circunstancias desaparezcan.
Si ya es duro de por sí tener que alejarte de tu animal durante un tiempo determinado, ¿Te imaginas lo duro que puede ser que cuando solicitas que te entreguen a tu animal, no lo hagan?
Pues bien, esta es una de las situaciones que pueden ocurrir, y que por desgracia ocurren con más frecuencia de la que nos gustaría.
No me devuelven a mi perro o a mi gato, ¿Qué puedo hacer?
Nos podemos encontrar que por razones de salud, no puedes cuidar a tu perro o a tu gato y es por ello, que decides contactar con alguien externo para que lo cuide hasta que tu enfermedad desaparezca o hasta que pueda permitirte volver a cuidar al animal.
También puede suceder que por la realización de un viaje, dejes a tu animal al cuidado de una persona, e incluso le pagues para ello.
O simplemente puede ser que por diversas razones tengas que optar por esta medida.
Pues bien, si te has tenido que dejar a tu animal durante un tiempo al cuidado de una tercera persona, puede suceder que a la hora de recogerlo no te lo entreguen
Pero, ¿Pueden no devolverme a mi animal?
Por regla general, la persona que se encarga del cuidado de tu animal tiene obligación de devolvértelo.
Sin embargo, para que esto sea así , tiene que quedar muy claro que el animal se ha dejado al cuidado de esa tercera persona únicamente para un tiempo determinado y que no se ha cedido.
Es decir, debemos poder probar, ( whatsapp, correos, testigos etc) que tu deseo era dejar al animal durante un tiempo determinado a esa persona, por unas razones concretas y que en una fecha determinada (o cuando desaparecieran las circunstancias que te llevaron a tomar esta decisión) recogerás al animal
En definitiva, debe quedar claro y poder acreditarse que se ha acordado la custodia del animal durante un tiempo determinado, no de forma indefinida. Es vital que no se deje entrever o que se pueda probar que la custodia era para tiempo indefinido.
Existen casos, en los que no queda muy clara la intención de temporalidad en la custodia para las partes , se llega a firmar un contrato de cesión o preadopción. En estos casos, si hay un documento de este tipo firmado, la persona que tiene al animal si que puede quedárselo, es más estaría amparada legalmente.
¿Qué implicaciones legales tendría quedarse al animal?
Si te encuentras en la situación en la que la persona a la que has dejado al cuidado tu animal, no te permite recuperarlo debes saber que la Ley te ampara.
En concreto, podrías iniciar un procedimiento judicial denominado acción reivindicatoria que está recogido en el articulo 348 del Código Civil y establece:.
La propiedad es el derecho de gozar y disponer de una cosa o de un animal, sin más limitaciones que las establecidas en las leyes.
El propietario tiene acción contra el tenedor y el poseedor de la cosa o del animal para reivindicarlo.
A través de este procedimiento se exige la posesión del animal. Es decir, se exige que te devuelva al animal, ya que tú eres el legitimo propietario de este.
A su vez, podría estar incurriendo en un delito de apropiación indebida tipificado en el artículo 253 del Código Penal, aunque tras la reforma del Código Civil por la Ley 17/2021, de 15 de diciembre, de modificación del Código Civil, la Ley Hipotecaria y la Ley de Enjuiciamiento Civil, sobre el régimen jurídico de los animales , este tipo de delitos no suelen prosperar si el objeto del mismo es un animal.
¿Qué puedo hacer?
Como ya has visto, la Ley te ampara, por lo que lo primero que debes hacer es ponerte en contacto con un abogado especialista en derecho animal para que te asesore.
Normalmente antes de iniciar cualquier acción judicial, se suele intentar un acuerdo extrajudicialmente. En concreto se suele enviar un burofax para intentar solventar de forma rápida la situación.
En caso de que esta comunicación no sea efectiva, es cuando se establece una estrategia judicial, bien por vía civil o penal.
Estos procedimientos judiciales suelen tardar en resolverse aproximadamente un año, por lo que cuanto antes se actúe mejor. Debemos pensar que durante el procedimiento judicial el animal, seguramente, se quede donde está, es decir con la persona que lo estaba cuidando.